jueves, 25 de julio de 2013

El fin de dos imperios y sus males

La caída de un imperio siempre es trágica, dejando una historia digna de contar. Estés es el caso de las familias Romanov y Habsburgo, grandes imperios del siglo veinte desaparecidos y perdidos en recuerdos de sucesos desafortunado. Ambos destinos comparten un factor en común, la Gran Guerra.
La familia Romanov fue una monarquía que duro al rededor de 400 años, bajo el concepto del "Zar", el padre de la nación. Para el reinado de Nicolas II; todo se veía cuesta arriba comenzando por el hecho de que su pueblo no quería a la Zarina Alejandra por ser de origen Alemán y dar a luz a 4 mujeres y un solo varón (hemofilico). El descontento del pueblo ruso se fue agravando cuando pierden la guerra contra Japón, y llegan algunos jóvenes burgueses pertenecientes a la parte letrada del país con ideales liberalistas pidiendo la redacción de una constitución. Al comenzar a escarcear productos de primera necesidad como el carbón, el trigo y el vodka el pueblo decide ir a protestar a las afueras del palacio del Zar en St. Peterburgo, este es el conocido "Domingo Sangriento", en el que murieron 200 personas a las que se les negó el paso al palacio, causando un gran disgusto entre las personas, el Zar decide revindicarse a través de la llamada "duma", era una institución para atender quejas, dicha duma se conformaba por populistas, eserreistas, marxitas, liberales y zaristas, así es como se inicia la revolución, tiempo después se prohíbe la duma y comienza a ser algo clandestino. La aparición de Rasputin en esta historia ayudo a la salud del príncipe Alejandro pero no a la imagen de su padre, debido a las peculariedades del mismo, lo unico que logro postergar la revolución que se avecinaba fue la gran guerra aunque a la larga trajo consigo aun mas desconformismo y la toma del palacio y de la familia Romanov que se vio obligada a abdicar dos veces, una por Nicolas II y otra por Miguel. En vista del vació, el soviet comandado por Lenin, quien propone las tesis de abril. Kerensky líder de la duma, decide que Rusia abandonara la gran guerra para comenzar una civil contra los zaristas; la soviet aprovecha este momento para enjuiciar al Zar, pero antes fue trasladado a Siberia. Al ganar la duma, el Zar es regresado a Rusia pero en su trayecto una de las soviet decide tomar manos en el asunto y asesinarlos, y así es como acaba la monarquía Romanov, ejecutados desprevenidamente en un cuarto del hotel, una muerte poco honroso y de tradición. Después de esto el soviet tomo cargo del ex-imperio para convertirlo mediante la vía revolucionaria en una sociedad socialista bajo los conceptos de Marx y los ideales de Lenin, Stanli y Trosky, pero esto ya es otra historia diferente.
El destino de la familia Habsburgo se vio sellado desde el momento en el que se convirtió una competencia para el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda en la parte comercial. Cuando Austro-Hungría le declara la guerra al Imperio Ruso y este mediante el tratado convoca a Alemania para apoyarlo, se inicia el principio del fin, seguido a esto Gran Bretaña le declara la guerra a Alemania y comienza una lucha de 4 años que debilito a Alemania como imperio, obligandolo a recurrir a hacer tratados  conferencias como México (el que nunca se concreto) y con el Imperio Otomano. Parecía que la Triple Alianza podría salir ganadora cuando en 1917 el Imperio Ruso abandona la guerra, hasta que Estados Unidos toma participación y Alemania tuvo que pedir un armisticio del cual solo resulto su rendición. En primavera de 1919, se firma en Francia el tratado de Versalles, en el cual uno de sus principales puntos era la disolvencia de la monarquía para pasar a ser una nación democrática, con elecciones y constituciones, y de esta manera culmina menos tragicamente el imperio de los Habsburgo.